Sin duda Venezuela y todo lo que le rodea da para escribir largo y tendido, no sólo en lo que acontece allá sino también en la forma en que sus desgracias son tratadas en otros rincones de ete pequeño mundo. Si damos un salto y cruzamos el Atlántico, ya en nuestra casa, nuestra querida y odiada patria, esa que tanto amamos los que nos mata y que tanto odian los que la vitorean con la boca y apuñalan con sus actos, curiosamente acusando de falta de patriotismo a los que les increpan sobre sus sabotajes...
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